Hasta el día 17 está abierto el plazo de matriculación en las escuelas infantiles públicas para el curso que viene. Para las familias que lo deseen, o que no les quede más remedio, es el momento de solicitar una plaza para los chiquitines que en el nuevo curso tengan entre cuatro meses y tres años de edad, algunos de los cuales todavía están felices en los vientres maternos.
Es sabido que la oferta no cubre ni de lejos la demanda. De hecho, en las 18 escuelas que hay en Pamplona, 13 gestionadas por el Ayuntamiento de Pamplona y otras cinco dependientes del Departamento de Asuntos Sociales, actualmente tienen capacidad para atender a 1.449 niños y niñas. De estas plazas, 802 se ofrecerán como vacantes para nuevos alumnos. El acceso es difícil y más todavía si se trata de conseguir una plaza en euskera: para el año que viene sólo habrá 89 vacantes en las escuelas Egunsenti e Izartegi, ambas situadas en el barrio de la Txantrea.
En el Casco Viejo existe sólo una escuela, Nuestra Señora de los Ángeles, en la calle Descalzos. Estos días, un grupo de madres y padres
ha puesto en marcha una campaña para solicitar a la administración que habilite plazas en euskera en este barrio pamplonés. El hecho es que
ya cuentan con más de medio centenar de familias con hijos e hijas de esta edad, con nombres y apellidos, que respaldan esta petición. Una cifra contundente teniendo en cuenta que la actual escuela acoge a 58 pequeños.
Estas familias lamentan también el nulo interés de la Administración por conocer los deseos de la ciudadanía. A la hora de hacer la matrícula tú puedes elegir una de las opciones que te ofrecen, pero no puedes expresar qué es realmente lo que tú deseas. El formulario no tiene una casilla para ello.
Mañana viernes, estos padres y madres se reunirán con el concejal José Iribas. Esperemos que la respuesta no sea que, efectivamente, se va a abrir una nueva escuela en el barrio en la que se va a dar cabida a otra lengua, y que ya tienen pensado hasta el nombre: Hello Old Town.
